18/7/07
¿y?
Buscando y buscando creo que estoy encontrando. Hubo que regresar en el tiempo, pero creo que funcionó. Regresé a ese momento en el que no me importaba tener las manos siempre limpias, en los que era la cosa más importante terminar (o simplemente seguir haciendo) una figura de plastilina, o de barro, o de colores. En los que si el piso o las paredes se manchaban de estar dibujando eran efectos secundarios sin importancia. Momentos en los que la aprobación pública es lo de menos, lo que importa es seguirlo haciendo porque se siente bien, porque es lo único que se puede hacer. Cuando terminar algo no se convierte en un acto de disciplina, sino de amor sin definición.
Me doy cuenta de que estos momentos imprimen en mi cara algo diferente; algo que cuando la ven algunas personas tóxicas huyen despavoridas. Es notorio! Por sus expresiones antes de correr creo que ven cómo se me forman las palabras en la frente: "SI, ¿Y?"
Hacer estas cosas llena mis vacíos de fantásticas plantas que nunca han existido en otro lado. Sutiles como enredaderas o prometedoras como un botón, van plagando mis paredes.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
7 comentarios:
Sí, unos scrolls y pude ver una ventana con un "pinche tanque azul" (jaja) y aquí veo una ventanita con un árbol y con un mundo que has creado.
Siempre has sido así, libre y determinada, llena de imaginaciones y de capacidades para concretarlas,...
NO LO OLVIDES!
aura, si alguien me conoce, esa eres tú muchacha! Y bueno, no sabes lo que significa que me digas esto. qué te digo vieja loca? qué sería de mi sin ti que me recuerdas (o mas bien enseñas) estas cosas?
Gracias muchacha loca, poderes para que te cures y un abrazo bien fuerte mientras.
te quedó pocamadre este mundo que te has inventado recientemente. y creo que es el principio del que de verdad quieres... un muy lindo principio.
Besos.
maría preciosa, gracias mil por tus palabras, por tu tiempo y por tus sabios oídos que siempre están cuando los necesito.
te adoro loca!
No tengo el gusto de conocerte, pero permíteme decir que cada que puedo (y que lo recuerdo), siempre pido no dejar de ser un poco "niño".
En efecto, para no dejar de sorprenderme con la maravillosa naturaleza, para recrearme en actividades simples, para estar en paz sin desconcierto... sin estrés; con amigos del parque que, quién sabe si los volveré a ver al día siguiente pero que, seguro la pasaron igual de padre que yo al jugar a la pelota...
Anda, compra unos gises, unas crayolas.
Bienvenido exenio, consideremos para efectos prácticos, que para haber llegado aquí (dada mi poca promoción y mercadotécnia) y haber comentado, ya algo me conoces.
Y si, mis crayolas y gises no sólo ya estan comprados, sino que el 50% de ellos ya esta en mis uñas.
un abrazo.
Larga vida a la creación!!!
De ese jardín tuyo, regálame un botón o piecito, pues. Déjame cristalizarlo; que permanezca inmortalizado y aunque me pidan que ponga a su pié una placa que recuerde ese instante, a su creadora, la fecha, la hora, los motivos, etc., simplemente contestaré que no... será mío y de nadie más.
Por otro lado, Sí, H.G. Wells no estaba equivocado... estoy coexistiendo conmigo mismo en un plano diferente, maravillándome una vez más... aquí comenzó todo... Y???
Publicar un comentario