7/7/07

Es verdad que volverte a ver, así por pura suerte (buena o mala), después de dos semanas me dio miedo primero y luego un dolorcito en el abdomen. Me duele que te duela, es lo que pasa. Ahora se que tenias que hacerlo así, a la mala, algo tan duro, tan contundente para que ya no tuviera yo duda alguna; porque si yo dudaba tu no tenias fuerza para alejarte. Si no venia de mi, tu solo no ibas a poder. ok.
Ahora hay otra opción, un poco como los sitios de internet que te permiten comprar una parcela en la luna. Lo malo es ilusionarse con la parcela en la luna. Lo malo es que a falta de ilusiones, las tomas de quien venga, no importa donde este.
Mejor sustituimos las ilusiones, o las pido prestadas, da igual, en ellas no cabe propiedad privada alguna.
Hay gotitas de agua en el cable de luz de mi ventana, que brillan y me levantan el animo.
Ya tengo que ponerme a dibujar.

1 comentario:

Exenio dijo...

Las ilusiones son hermosas por intangibles; si lo fueran (tangibles), serían más como las pompas de jabón: sabes de dónde vienen, cómo fueron creadas, qué forma (inclusive) quieres que tengan pero, inevitablemente, también sabes que son efímeras y que desaparecerán ante tus ojos cuando menos lo esperes.

Que grato que seas una artista; aunque no me lo creas, así lo soñé, viendo como se creaban ante mi esos parajes salidos de tu imaginación; vale, de tus mismas ilusiones.

Déjame congelar el momento...